AntiGravity Yoga, desarrollado por Christopher Harrison en 2007, se popularizó rápidamente y está cada vez más disponible en estudios especializados y gimnasios que buscan tendencias como Crunch, con sede en la ciudad de Nueva York. AntiGravity Yoga requiere el uso de un columpio de tela patentado, suspendido del techo, llamado AntiGravity Hammock (natch). Con el apoyo de la hamaca, puede estirar y fortalecer sin sobrecargar sus articulaciones vulnerables. Aunque los movimientos pueden parecer acrobáticos, en realidad son bastante accesibles y ofrecen una forma divertida de cambiar tu rutina de yoga.