Cuando se trata de clasificar los postres helados más populares, la mayoría de la gente estaría de acuerdo en que el yogur helado es más saludable que el helado. Aquí hay una versión casera simple que los supera a ambos.
En comparación con el helado, el yogur helado contiene unos pocos gramos menos de grasa por porción, en particular grasas saturadas, que es importante limitar para una salud cardíaca óptima. Sin embargo, cuando miras el panorama general, entre el azúcar agregada y los aderezos, es posible que el postre favorito no sea tan saludable después de todo.
Esta versión de bricolaje es rápida y fácil (y mucho, mucho más barata). Obtienes un poco de proteína de relleno del yogur griego y una pequeña dosis de omega-3 saludables para el corazón de la linaza. Incluso los flavonoides de las chispas de chocolate amargo ofrecen beneficios cardiovasculares, como mejorar el estado de las plaquetas y reducir la presión arterial.
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Licúa el yogur griego, la linaza, las fresas congeladas, el jugo de limón, la mermelada y el agua. La textura resultante debe ser espesa pero suave.
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Transfiera la mezcla licuada a un tazón y agregue suavemente las hojuelas de coco y las chispas de chocolate amargo.
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Puede servir inmediatamente o congelar durante 15 minutos a media hora para permitir que el yogur congelado se reafirme. Cubra con almendras picadas antes de servir. Guarde las sobras en el congelador y deje que se descongelen un poco antes de disfrutarlas.
Variaciones y sustituciones de ingredientes
No tenga miedo de usar yogur griego con toda la grasa si desea un producto más cremoso. Solo está usando 1/4 de taza para toda la receta, por lo que la diferencia de grasa por porción no será demasiado significativa, pero será más satisfactoria.
Experimente con sabores afrutados. Si bien las fresas contribuyen al sabor dulce y ácido característico del yogur helado, otras opciones como los arándanos, el mango e incluso el plátano también serían sabrosas. La clave es asegurarse de que estén bien congelados. Puede omitir la mermelada si está usando la fruta más dulce.
También puede cambiar sus ingredientes. Todas las nueces proporcionan fibra abundante, grasas beneficiosas para el corazón y un crujido satisfactorio, así que use su favorito.
Consejos para cocinar y servir
Independientemente de la fruta que esté usando, asegúrese de que esté bien congelada. De lo contrario, quedará con una textura líquida y poco apetitosa.
Puede cortar fruta fresca y congelarla usted mismo o comprar los paquetes congelados; son útiles cuando la fruta no está en temporada o si tiene prisa. Cortar la fruta en trozos más pequeños ayuda a que se mezcle más suavemente, por lo que, si puede, deje que la fruta congelada se descongele un poco y córtela antes de continuar con la congelación.