Cómo empezar a hacer ejercicio: Conseguir el ritmo adecuado es fácil

Sí para ti el gimnasio es un aburrimiento, o el aerobic y las pesas requieren demasiado esfuerzo, prueba con otras actividades más suaves. Lo importante es empezar a hacer ejercicio. Por supuesto, clases de gimnasia a ritmo lento no permite quemar las mismas calorías que una clase de aerobic o una sesión de pesas, pero de todas formas resulta muy útil.

Cualquier tipo de entrenamiento aporta ciertas ventajas desde el punto de vista de la forma física. Y los ejercicios más lentos permiten desarrollar, sobre todo, el control del propio cuerpo y la concentración mental.

En particular, es muy importante el stretching, gimnasia de estiramiento que entrena específicamente la elasticidad muscular y la movilidad de las articulaciones, y te complementa cualquier actividad deportiva o Gimnástica.

Conseguir el ritmo adecuado al empezar a hacer ejercicio es muy fácil

El secreto de un cuerpo sano es la constancia. No hay que olvidar que para perder la forma física  es suficiente la mitad del tiempo que necesitamos para adquirirla. Pero también es verdad que para una persona acostumbrada al ejercicio físico, el tiempo de recuperación es mucho más corto. En resumen, aunque los beneficios conquistados con el entrenamiento no duran para siempre, el que está aunque solo sea un poco entrenado vuelve a ponerse en forma fácilmente.

Para los que comienzan desde cero, sin embargo, lo importante es superar el aburrimiento y el esfuerzo de los primeros tiempos. Al cabo de pocas semanas conseguirán el ritmo adecuado. Lo fundamental es conocer las motivaciones de cada uno, porque estás corresponden al empeño que se pondrá en el programa de entrenamiento.

Si los objetivos son realistas, fácil seguir el plan de gimnasia sin abandonarlo. Entre otras cosas, porque la sensación de bienestar general que se deriva del ejercicio físico es un estímulo más para no dejarlo. Poco a poco, hacer gimnasia se convertirá en una de las piezas básicas para sentirnos mejor.

Fuera la tensión y el cansancio

Al final de una jornada intensa de trabajo o de estudio, el deporte y la gimnasia ayudan a relajarse y a revitalizarse. El entrenamiento resulta útil para recuperar las energías psicofísicas y superar la tensión acumulada gracias a que estimula la producción de catecolaminas, en especial de la adrenalina y la noradrenalina. Estás sustancias, que se segregan en mayor cantidad durante la actividad deportiva, le hacen a uno sentirse más despierto y activo durante unas dos o tres horas. Así pues, el aerobic o las pesas son la solución para llenar el depósito de energía.

Además, sesión de gimnasio es también un tratamiento de belleza necesario. El ejercicio físico mejora la circulación de la sangre y la aportación de oxígeno a la piel, tú está más nutrida y suave.

Y después del esfuerzo, continúa. Una ducha caliente, sauna, un baño turco o un masaje con una dosis generosa de crema aplicada por todo el cuerpo son el complemento ideal para relajarse. Una reciente investigación efectuada en Estados Unidos para puesto de manifiesto que aquellas personas que se ocupan de su cuerpo sufre menos ansiedad o depresión.

Otros motivos para moverse a realizar ejercicio físico

– Mantenerse joven

La actividad física reduce el peligro de enfermedades cardiovasculares, de diabetes e incluso de depresión. Además, la calidad de vida. Hechos que confirman las máximas autoridades mundiales en el ámbito de la medicina deportiva.

– Mejorar la rapidez de reflejos, la capacidad de autocontrol y la concentración mental

En estados unidos, el ejercicio aeróbico se denomina también neurobics porque mejora la circulación de la sangre, lleva más oxígeno al cerebro y estimula las neuronas (células del cerebro) a producir los neurotransmisores, es decir, las sustancias bioquímicas que activan el pensamiento y la creatividad.

– Aumentar el índice de colesterol » bueno» en la sangre

Estás lipoproteínas de alta densidad son las encargadas de limpiar crías y disminuir el riesgo de enfermedades cardiocirculatorias, pone de manifiesto estudio realizados en Estados Unidos a mujeres que practicaban regularmente aerobic.

– Reducir el riesgo de osteoporosis

Numerosas investigaciones han confirmado los beneficios del ejercicio físico para la protección de la pérdida de masa mineral del sistema esquelético y en el aumento de la densidad ósea.

– Aumentar las defensas inmunitarias y favorecer un estilo de vida más sano

Un estudio realizado por la Universidad de Wisconsin en Estados Unidos asegura que aquellos jóvenes que siguen algún tipo de entrenamiento físico consumen mucho menos tabaco y alcohol.

– Ayudar a superar el síndrome premenstrual

Dolor de cabeza, hinchazón, irritabilidad, cambios bruscos de humor, depresión. La mayoría de las mujeres padece el síndrome premenstrual entre el séptimo y el décimo cuarto día antes de iniciar su ciclo.

¿Soluciones?

Además de un régimen equilibrado pero rico sobre todo en alimentos con vitaminas del grupo B (como levadura de cerveza, germen de trigo, cereales integrales, fruta seca, yema de huevo, leche, castañas, lechuga, coliflor, zanahorias), es muy importante también realizar alguna actividad deportiva regularmente. Un ejercicio físico constante reduce considerablemente estas molestias.

– Regularizar el ritmo sueño- vigilia

Pero cuidado, es indispensable hacer gimnasia a lo sumo 3 horas antes de acostarse, de lo contrario se arriesga uno a pasar la noche en vela. Quién duerme lo suficiente es más enérgico, optimista y activo, mientras que los que no descansan de forma adecuada se arriesgan a tener momentos de gran cansancio y escasa concentración durante todo el día.

– Combatir la celulitis

El movimiento aporta más sangre y oxígeno a los tejidos, facilitando así la eliminación de toxinas, una de las causas principales de este problema.

Prohibido entrar en el gimnasio, como a una celda de castigo. Sí el objetivo es el bienestar general, la diversión tiene que ser prioritaria para la preocupación por la forma física. Hay que superar la pereza y hacer ejercicio merece la pena el esfuerzo.

Fuente consultada: https://www.everydayhealth.com/