El monitor: un experto que te brindará ayuda

El plan de entrenamiento tiene que establecerlo un monitor competente, de lo contrario se corre el riesgo de perjudicar los músculos y las articulaciones. Si os aburre andar solos, proponedle a un amigo o a vuestra pareja que os acompañe.

Es más útil practicar una actividad deportiva con otra persona. Los entrenamientos en pareja son más divertidos y al animarme recíprocamente disminuye el riesgo de abandonar tras las primeras sesiones. Y no es sólo eso. Hay quien sostiene que practicar un deporte con otra persona ayuda incluso las relaciones sociales. Pero cuidado, hay que seguir dos reglas fundamentales para evitar que la competitividad pueda perjudicar a la armonía de la pareja.

Consejos del monitor

1. Se te acompañe practicar tus actividades deportivas preferidas, no intentes convencerle a toda costa para que siga tus entrenamientos. Y al contrario, si le gusta correr o nadar contigo, no te dejes dominar por el síndrome puesto del atleta egoísta.
2. Es el que está más entrenado no tiene que mortificar al otro. Es justamente el mejor el que debe animar y motivar todo lo posible al otro.

Veamos ahora con más detalles todas las razones por las que merece la pena realmente mantenerse siempre en movimiento.

Razones para hacer ejercicio

Los ritmos de vida son siempre tan intensos, que no queda ni un minuto para hacer gimnasia. Y, aunque sobre un poco de tiempo, parece que uno no tiene fuerza ni para moverse. Sin embargo, se ha demostrado científicamente que las actividades físicas prolongadas por lo menos durante 20 minutos (cómo, ejemplo, aerobic, natación o marcha a paso rápido) aumentan la producción de beta endorfinas sustancia presente en la sangre que tiene el poder de unirse con algunos receptores presentes en el cerebro, infundiendo una sensación de gran euforia y dinamismo.

Esto significa que entrenarse, tras el primer esfuerzo de voluntad, no cansa. Todo lo contrario, es una manera de recuperar y, por lo tanto, el método ideal para todos aquellos que quieren afrontar el resto de la tarde con la máxima vitalidad.

Especialmente si se tienen en cuenta que, como dicen los psicólogos, la mayor parte de las veces el cansancio que se siente al final de una jornada de trabajo en la oficina es más me encanta el físico.

Se necesita muy poco para mantenerse en forma.

Hasta hace poco tiempo se aseguraba que la única manera de estar en forma era pasar horas y horas de extenuantes entrenamientos más o menos cotidianos. Sin embargo, se ha comprobado que un programa demasiado su virus es difícil de seguir de forma constante y producen numerosas deserciones.

Para mejorar el bienestar general son suficientes 3 entrenamientos semanales de media hora cada uno, incluso fraccionados en el mismo día. Por ejemplo, se pueden sumar tres paseos breves a paso rápido de 10 minutos cada uno.

La gimnasia ayuda a adelgazar.

Se ha comprobado que para quemar los kilos de más un régimen hipocalorico por sí solo no basta. Es verdad que los resultados son rápidos e inmediatos, pero se corre el riesgo de quedarse con los músculos blandos y flácidos y, a la larga, comer poco es contraproducente incluso para el propio adelgazamiento.

El organismo humano ha sido programado para sobrevivir en condiciones de carencias alimentarias. Así pues, cuándo se sigue un régimen de bajo contenido calórico, el metabolismo – o sea, la capacidad del organismo de quemar calorías – tiende a frenarse para ahorrar energía y cuanto menos se come, menos se quema.

Se ha demostrado recientemente que, si una persona pierde el 10% de su peso, la capacidad de su metabolismo se reduce en un 15%. Es decir, que compensa la menor aportación de alimentos con una disminución del consumo de calorías. La actividad física, ayuda a eliminar más rápidamente, mantenimiento despierto el metabolismo.

Así pues, es inútil hacer régimen esta draconianos e insensatos. La única solución realmente eficaz (e inteligente) para perder peso conservando la salud consiste en combinar régimen y gimnasia, en las dosis adecuadas.

Una alimentación equilibrada permite obtener la proporción correcta entre la masa magra y la grasa, a la vez que un programa de entrenamiento acelera el consumo calórico y mejora la tonicidad muscular. Además, acostumbrarse a moverse es también un estímulo excepcional para mantener un estilo de vida más sano y un régimen más equilibrado.

Fuente consultada: https://ymcagta.org/