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¿Sabes lo que es el ácido láctico? Si alguna vez has sentido una sensación de quemazón en los músculos cuando ejecutas muchas repeticiones de ejercicios, se debe a la acumulación de ácido láctico.
No te pierdas nuestros consejos sobre cómo podemos reducir su efecto para que no afecte de forma negativa al entrenamiento.
Qué es el ácido láctico
Podemos definir el ácido láctico como una sustancia producida por los músculos de forma natural a partir de la descomposición de la glucosa ante la ausencia de oxígeno. Esto se da cuando el cuerpo ha gastado todas sus reservas de energía y necesita más para continuar funcionando.
Es una situación que se produce habitualmente cuando se realiza ejercicio de alta intensidad y corta duración, por ejemplo en los levantamientos de pesas o sprints.
Normalmente, cuando un usuario está realizando ejercicio de baja intensidad, el cuerpo puede ir eliminando el ácido láctico generado. Por el contrario, cuando trabajamos de forma intensa, nuestro organismo no puede eliminarlo de forma tan rápida.
Esa sensación de quemazón en los músculos afecta de forma negativa al rendimiento, por lo que es fundamental intentar evitar su aparición.
Síntomas de la aparición de ácido láctico
Los principales síntomas que el deportista experimenta en esta situación, además de la quemazón que ya hemos mencionado, son los siguientes:
- Dolor muscular.
- Agotamiento y cansancio.
- Aumento de la temperatura corporal.
- Náuseas y mareos.
Cómo eliminar el ácido láctico en los entrenamientos
Te dejamos algunas recomendaciones para evitar la aparición de esta situación. Toma nota:
Adaptar la intensidad del ejercicio
Si eres principiante, es fundamental que adaptes la intensidad del ejercicio. El ácido láctico suele aparecer en este perfil de usuarios, puesto que no saben controlar el nivel de esfuerzo.
Por otro lado, aquellos deportistas que entrenan a mayor intensidad pueden sufrir también la acumulación de lactato. En estos casos, es fundamental hacer una adaptación gradual de la intensidad del entrenamiento.
Hidratación: beber agua para evitar la acumulación de ácido láctico
Como sabrás, la hidratación es fundamental en el deportista. Beber agua te ayudará a evitar la acumulación de ácido láctico.
Lo ideal es que prestes atención a este factor antes, durante y después del ejercicio. Bebe pequeños sorbos de agua para mantenerte hidratado en todo momento. Además, ten en cuenta que la deshidratación puede jugarte una mala pasada.
Controla la respiración
Quizá te resulte extraño, pero debemos aprender a controlar la respiración durante el ejercicio para evitar estos síntomas. ¿El motivo? La falta de oxígeno en el cuerpo acelera la acumulación de esta sustancia en nuestro organismo.
Conclusión
El ácido láctico se da de forma frecuente tanto en principiantes como en deportistas ya experimentados. Uno de los principales motivos de su aparición se debe a mantener niveles intensos y con poca recuperación. La realidad es que la acumulación de lactato puede jugar una mala pasada al deportista, puesto que aparecen síntomas como náuseas, mareos, cansancio, etc.
Lo ideal es revisar la adaptación del nivel que escogemos durante los entrenamientos e ir aumentando la intensidad de forma progresiva. Otros factores como la respiración y la hidratación también juegan un papel crucial.
¿Conocías la acumulación de ácido láctico en los músculos? ¿Lo has experimentado alguna vez?
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